miércoles, 20 de marzo de 2019

13 de Marzo de 2019: Cumpliendo mi promesa.

Nunca se me da bien hablar de sentimientos, así que he preferido escribirlos en una última carta de despedida. Si soy sincera, no sé si todo ésto llegaré a decírtelo o si llegarás a leerlo, supongo que si no serán unas cuántas hojas escritas en sucio en un par de papeles arrugados que acabarán igual de rotos que yo, pero necesito decírtelo, necesito abrirte mi corazón una última vez antes de notar que está igual de roto como cuando te conocí; quiero mantener la esperanza en que quizá ésto te abra los ojos y así vuelves pero supongo que ésto no es como en las películas que suelo ver los sábados por la tarde en que parece que todo acaba bien. Quiero, o quería no sé, creer que nosotros seríamos la excepción y que todo ésto saldría bien...me equivoqué. Llevo un rato pensando en lo bonito que sería despertar justo ahora a tu lado y poder verte dormir, acariciarte despacito comprobando que estás ahí; llevo días pensando en lo bonita que ha llegado a ser mi vida desde que te tengo, bueno, que te tenía. Sé que a partir de ahora las cosas no van a ser fáciles, sé que cuando escuche el sonido del viento pensaré en ti; sé que cuando escuche mi risa recordaré lo mucho que te gustaba hacerme reír; incluso me atreveré a decir que cuando me mire al espejo, pensaré en lo mucho que me has ayudado a enseñar a quererme, pensaré en lo mucho que te gustaba mi boca y en las ganas de saber a qué sabían mis labios. Siento que el mundo se va a poner en mi contra y va a ser que te recuerde y te eche de menos, de hecho ya lo estoy haciendo; ahora estoy aquí sentada en medio de la nada, pensando en que me importa una mierda el hecho que llevemos poco tiempo conociéndonos; contigo, desde siempre, he notado que el tiempo no ha importado, que nunca ha existido, pues tenías, y tienes para qué vamos a engañarnos, el poder de hacerme olvidar todo lo malo y sé que voy a echar de menos eso, voy a echar de menos a mi YO feliz porque contigo realmente lo era, y ahora en éstos momentos sé que todo lo que escriba va a ser por y para ti. No sé si ésto que te estoy diciendo es como un grito al vacío que espero que oigas, o si es más bien un último adiós para recordarte lo mucho que llegué a amarte; sólo sé que he tenido que escribir todo ésto para no olvidarme nada, para poner todos mis pensamientos y sentimientos en orden y para decirte todo lo que pienso. Juro que estoy intentando por todos los medios dejar de llorar y sonreír, pero es que esa sonrisa no me la creo ni yo, no es tan fácil cuando has perdido algo tan bonito. Quiero que sepas que se me hará raro no hablarte, el ver que no me saludas o no ver tu nombre en mi pantalla escribiendome; sé que ahora, cada vez que suene mi puerta, el corazón empezará a bombear sin control deseando que seas tú y acabaré llevándome otra decepción como siempre me pasa. Voy a echar de menos que me hagas cosquillas, que me piques el estómago y que me juegues brusco...y sobre todo sé que voy a echar mucho de menos que me digas que me amas, así de la nada, y que aparezca esa sonrisa tonta en mi rostro; voy a echar de menos que me digas que todos esos momentos conmigo son los mejores, el quedarnos riendo por tonterías o hablando las máximas estupideces que pudiéramos; se me hará raro no oírte reír ni contemplar tus ojos, tus hermosos ojos, siempre te lo dije. Voy a echar de menos que quieras volverme loca todas las noches de mi vida para siempre, supongo que sí voy a echarte de menos, a ti y a todo lo bueno que me has dado, incluso me atrevería decir que también a lo malo, porque al menos te tenía. Quiero que sepas algo, tú, desde donde estuvieses y con un mensaje que me enviaras, hacías que sintiera más que cualquier persona que ha llegado a besarme, tú me hacías vibrar sin necesidad de tocarme; y yo, como una estúpida creyendo saber lo que era el amor y no lo he sabido hasta que te conocí, porque sí, he acabado loca y profundamente enamorada de ti, y puede que la esté cagando al decir todo ésto pero ambos prometimos sinceridad y aquí la tienes, sólo quiero pedirte algo: quiero que hagas todo lo que no has podido hacer conmigo, que demuestres a todo el mundo todo lo que tienes y que llegues a ser lo que siempre has querido, aunque yo no esté ahí para verlo, sé que lo harás y aquí, en medio de Popayán, habrá una chica orgullosa de ti, de hecho ya lo estoy. Quiero que, te enamores y dejes que esa chica sea tu primera en todos los sentidos de la palabra, ya que yo no he podido. Quiero que le des a ella eso que un día me diste a mí, pero hazlo más intensamente, sin miedo, sin represión de ningún tipo, y estoy segura de que la harás inmensamente feliz con el sólo hecho de tu compañía; y si la encuentras, dile que te cuide como yo no he sabido, dile que te mime cuando estés mal y que te abrace en tus peores días, que eso es lo único que necesitas. Dile que tenga cuidado con las cosquillas, que no las odias sino que no las soportas. Dile que te acaricie mientras te besa, como a mí me hubiese encantado seguirlo haciendo, pero ya no podré; incluso dile que te muerda pero con cuidado, no vaya a ser que te deje una marca de por vida, pero no ese tipo de marca que tú has dejado en mí. Enséñale tus secretos, tus miedos, tus pasiones y tus retos; pero sobre todo, dile que te haga muy feliz así como yo no lo he sabido hacer. Se me olvidaba, enséñale a que te susurre bajito lo mucho que ella llegue a quererte, y de mi parte, si la encuentras, quiero que le digas que ha tenido mucha suerte en que le beses, le acaricies, le mires a los ojos y le digas que la amas, y por favor no le falles nunca, ya te lo he dicho, no le falles a alguien que realmente apostaría su vida por ti. Dile que una chica como yo se muere de la envidia por no ser ella, aún así quiero que sepas algo, creo que nunca en la vida habrá una chica que llegue a mirarte como yo lo hice, pueden intentarlo si quieren pero nunca podrán hacerlo. No quiero que pienses que te escribo ésto sólo por querer una respuesta, supongo que ésta es mi forma de decirte adiós; pienso que tienes derecho a leer todo ésto, fuiste capaz de romper ese orgullo y esa barrera que construí hace tiempo y sólo pocos pueden romper. Y ahora sólo me queda apretar los dientes y sonreír; sé que ésta no es la primera noche en vela que paso sin ti y sé que tampoco será la última, llorándote, sin hablarnos como antes, verte en línea y saber que no es por mí; y como una tonta intentado leer nuestras conversaciones a ver en dónde la hemos jodido, en dónde hemos fallado, pero la verdad es que no sé bien en qué momento nos perdimos. Aún así, quiero que sepas algo, normalmente cuando alguien sale de mi vida, cierro totalmente la puerta por si deciden volver, paso página, pero contigo he dejado la puerta encajada por si vuelves, sé que si te asomas por ella dejaré que entres. Eres como esa página del libro que doblas la esquinita porque es tu favorita, y pasarías días y días leyéndola; has sido como esa página en blanco en la que he podido escribir tantas cosas que a estas alturas ya se han esfumado; eres el adiós que jamás sabré decir. Quiero que sepas, antes de irme, que has tenido el poder de volverme loca en segundos y de pensar que de verdad valió la pena esperar tanto tiempo por alguien como tú. Llevo ya como unas 10 páginas escritas para ti y siguen siendo insuficientes para decirte todo lo que has dejado aquí; sé, sin duda alguna que para mí ha sido un placer joderme el corazón así, hay gente que lo hace de otras formas pero yo lo hice enamorándome; no sé si al acabar de escribirte todo ésto mi corazón acabará un poco más roto de lo que ya está, pero supongo que ya no me importa. Sólo quiero que sepas que si cambias de opinión, aquí estaré pensando y creyendo que de verdad vale la pena, escríbeme si crees que ésto vale la pena; y si no me escribes quiero que sepas que aparte de que te amo, quiero confesarte que yo no era magia como lo dijiste en alguna ocasión, lo que era mágia era lo nuestro; pensaba que no habría nunca otra mejor que yo para aguantar a un tonto enamorado como lo eres tú, o eras... Ésto nuestro fue lo más mágico y bonito que he llegado a tener en toda mi vida. Lástima...




No hay comentarios:

Publicar un comentario